Y las mujeres de la siguiente generación, las nacidas entre 1956 y 1960, que prácticamente ya han acabado su vida fecunda, apenas superan los 1,5 hijos de descendencia final. Las razones que explican el no reemplazo generacional se hallan en una disminución drástica de los terceros y posteriores hijos que, de suponer el 36% del total de hijos en las mujeres de las generaciones de 1941 a 1945, han pasado al 9% en las nacidas entre 1956 y 1960. Esta disminución del número total de hijos ha tenido como consecuencia la concentración del período fecundo en unos pocos años. Si las generaciones de 1936 a 1940 tenían sus hijos en un intervalo de 6,5 años, las mujeres nacidas 20 años después los tienen en 3,4 años.
|