Según los resultados de la tercera Encuesta de Presupuestos de Tiempo, llevada a cabo por Eustat en 2003, la distribución diaria del tiempo dedicado por la población a las diversas actividades observadas no muestra cambios sustanciales desde 1998, aunque sí apuntan nuevas tendencias.

La población de 16 y más años de la C.A. de Euskadi dedica un tiempo medio social de 11 horas y 50 minutos a la satisfacción de las necesidades fisiológicas y los cuidados personales, 16 minutos más que en 1998; así mismo, dedica al trabajo remunerado y/o la formación 3 horas y 23 minutos, a los trabajos domésticos 2 horas y 23 minutos, a la vida social 58 minutos –algo menos que en 1998–, al ocio 3 horas y 56 minutos, a trayectos 1 hora y 8 minutos y a cuidados a otras personas del hogar 21 minutos diarios.

Se dedican 8 minutos más que en 1998 a comer fuera de casa, incrementándose un 36% la población que realiza esta actividad.

El tiempo dedicado al sueño se cifra en 8 horas y 45 minutos y no presenta variaciones respecto al período anterior. El aumento en el tiempo dedicado a necesidades fisiológicas y cuidados personales se deriva fundamentalmente del tiempo empleado en comidas y aperitivos fuera de casa, actividad cuya tasa de participación –porcentaje del total de la población que realiza dicha actividad- ha crecido 14 puntos porcentuales (un 36% más), mientras su tiempo medio por participante resulta ser de 8 minutos superior al dato de 1998, situándose ahora en 1 hora y 13 minutos.

El tiempo de trabajo se reduce en 14 minutos diarios en los últimos 5 años

En el último quinquenio y contando sólo de lunes a jueves, disminuye en 14 minutos el tiempo que se dedica diariamente al trabajo remunerado por parte de la población ocupada. Por otro lado, también disminuye el tiempo que los estudiantes dedican a estudiar: 26 minutos menos que en 1998 de lunes a jueves y hasta 43 los viernes.

En 2003 las mujeres trabajaban en empleos remunerados 1 hora y 9 minutos menos de media que los hombres, también contando sólo de lunes a jueves. La jornada laboral diaria de los varones en esos días suponía una media de 7 horas y 4 minutos. Los viernes los varones trabajan 4 minutos menos y las mujeres hasta 25 minutos menos que el resto de los días laborables.

Una parte sustancial de las variaciones detectadas en los usos del tiempo deriva del incremento del trabajo femenino remunerado. La tasa de participación masculina en el trabajo profesional principal en 2003 resultó ser del 46,8% y la femenina del 30,8%, 2,2 puntos porcentuales más que en 1998 en el primer caso y el doble (4,1 puntos porcentuales más) en el caso de las mujeres.

Algo más de una de cada cinco personas de 16 y más años –el 21,4%- afirman no dedicar tiempo a las labores domésticas, mientras que el resto emplea 3 horas y 2 minutos diarios.

Las mujeres emplean en las labores domésticas 3 horas y 31 minutos, 2 horas y 21 minutos más que los varones. Cae 3 puntos porcentuales el porcentaje de población que realiza estas tareas –un 78,6% en 2003-, pero se dedican 4 minutos más de media que en 1998. No obstante, se da una distribución ligeramente diferente por día de la semana: de lunes a jueves apenas varía –2 minutos más-, en el viernes se dedican 18 minutos menos y entre 18 y 20 minutos más los sábados y domingos.

Una de cada cinco personas de 16 y más años –el 19,7%- llega a dedicar una media diaria de 1 hora y 46 minutos a cuidar personas del hogar, ya sean menores o ancianos. Se produce un incremento de 5 minutos con relación a 1998. Esta actividad a los varones les ocupa 1 hora y 22 minutos y a las mujeres 2 horas. El cuidado a menores crece 6 minutos, siendo de 1 hora y 22 minutos para los que tienen esta obligación, mientras que llega a disminuir en casi 15 minutos cuando se trata del cuidado de adultos.

De media, la población dedica 7 minutos diarios al ordenador y a Internet

El 91,5% de la población tiene tiempo para el ocio pasivo –prensa, televisión, espectáculos, juegos, etc.- aunque este porcentaje ha descendido 2,6 puntos porcentuales respecto a 1998. El conjunto de la población dedica una media de 2 horas y 39 minutos diarios a este tipo de ocio, decreciendo 15 minutos en los últimos cinco años.

Si se separan los medios de difusión e información –prensa y audiovisuales-, se aprecia una caída en la proporción de usuarios de 5 puntos porcentuales, llegando a una tasa del 84,5% en 2003. Estos dedican una media de 2 horas y 28 minutos a los medios citados, 15 minutos menos que en 1998. Este tiempo ha disminuido 17 minutos para los varones y 12 para las mujeres.

Algo más de un cuarto de la población –el 26,7%- afirma dedicar una media de 1 hora y 11 minutos a relajarse, pensar, a no hacer nada, 19 minutos más que hace cinco años.

El tiempo medio social dedicado al ocio activo – a practicar deportes, pasear o realizar excursiones, navegar por Internet, etc.- resulta 5 minutos superior al de 1998. Un 60% de la población realiza actividades incluidas en este apartado, con un 7% de crecimiento en el último quinquenio.

Se hace notar la presencia de actividades relacionadas con Internet y otros productos de la Informática, sumando un tiempo medio social de 7 minutos diarios. Los varones muestran una participación superior a las mujeres en estas actividades.

Disminuye un 28% la población que dedica tiempo a visitar a los amigos o a potear, dedicando a estas actividades 2 horas y 5 minutos

Algo más de la mitad de la población de 16 y más años –el 52,7%- dedica 1 hora y 50 minutos diarios a actividades relacionadas con la vida social: visitar amigos, conversar, participar en partidos políticos o asociaciones, a prácticas religiosas, etc. Aunque ha disminuido en casi 6 puntos porcentuales la proporción de la población que realiza estas actividades, el tiempo medio dedicado ha crecido en 2 minutos para los que sí las realizan.

Un 18,2% de la población declara emplear tiempo en visitar a los amigos o en recibirlos, en salir a potear o tomar copas o en asistir a verbenas o bailes, cifra sensiblemente inferior al 25,6% obtenido en la encuesta de 1998. El tiempo medio dedicado por este grupo al día asciende a 2 horas y 5 minutos, cuatro más que hace cinco años.

Crece el tiempo de los que conversan, sobre todo telefónicamente, en 14 minutos diarios, llegando a alcanzar 1 hora y 15 minutos. Los sábados y domingos esta media asciende a 1 hora y 32 minutos y 1 hora y 27 minutos, respectivamente.

Los vizcaínos resultan ser los residentes de la C.A. de Euskadi que menos duermen y más tiempo dedican a telefonear y a conversar; los alaveses los que trabajan más tiempo y estudian menos y los guipuzcoanos los que hacen más deporte, atienden más a los medios de difusión e información y a la vida social.

Los vizcaínos duermen 8 horas y 37 minutos al día, 19 minutos menos que guipuzcoanos y 15 menos que los alaveses. De estos últimos, los que están ocupados dedican 7 horas y 14 minutos de media diaria a trabajar, 8 minutos más que los guipuzcoanos y hasta 14 más que los vizcaínos.

Sin embargo los estudiantes alaveses –realizan estudios reglados- dedican 18 minutos menos al día a estudiar y a acudir a clase que sus homónimos guipuzcoanos y vizcaínos, que emplean 4 horas y 55 minutos de media diaria.

Un 17,5% de los residentes en el territorio histórico de Gipuzkoa suelen visitar o recibir amigos, potear o actividades similares incluidas en lo que se entiende por vida social, dedicando de media 2 horas y 16 minutos, 18 minutos más que los alaveses y 16 más que vizcaínos.

Los vizcaínos son los que en mayor proporción indican que hablan habitualmente por teléfono o conversan con amigos y familiares, hasta un 42,8%, mientras que el porcentaje de alaveses y guipuzcoanos se sitúa en el 35%. Además, dedican 1 hora y 17 minutos de media al día, 8 minutos más que alaveses y 2 más que guipuzcoanos.

Los guipuzcoanos dedican 1 hora y 31 minutos a realizar deportes, 14 minutos más que alaveses y 10 más que vizcaínos.

También son los guipuzcoanos los que más tiempo de media dedican al día a los medios de difusión e información: 2 horas y 34 minutos, 14 minutos más que los alaveses y 7 más que vizcaínos.