En los tres primeros meses de vigencia de la ley 13/2005, de 1 de julio, por la que se modifica el Código Civil en materia de derecho a contraer matrimonio, se celebraron en la C.A. de Euskadi 23 bodas entre personas del mismo sexo, de las que 4 tuvieron lugar en Alava, 14 en Bizkaia y 5 en Gipuzkoa, según datos de Eustat. Todas ellas fueron bodas entre varones excepto una, entre mujeres.

En los meses de julio, agosto y septiembre de 2005 se contabilizaron en la C.A. de Euskadi 3.359 matrimonios, lo que supone una disminución del 2% con respecto al mismo trimestre del año anterior. Los vizcaínos celebraron 1.754 bodas, con una disminución del 1%; los guipuzcoanos, con 1.043 bodas, registraron un 4% menos y sólo los alaveses, con 438, tuvieron un aumento cifrado en el 5% respecto a igual período del año anterior. En el caso de residentes fuera de la C.A. de Euskadi, el número de bodas ascendió a 138.

Julio fue el mes con más bodas (1.557), frente a las 1.354 de septiembre. Por otra parte, agosto siguió siendo el mes de verano en el que menos bodas se oficiaron (448).

Destaca en este tercer trimestre el incremento en el número de bodas celebradas por la iglesia. Frente a los meses invernales, en los que más de la mitad de los enlaces fueron de tipo civil, en este período el 63,4 % de las celebraciones fueron de carácter religioso, aunque disminuyen un 3% respecto al mismo período del año anterior. En Gipuzkoa los matrimonios canónicos supusieron el 61% del total, en Bizkaia el 63% y en Alava la cifra llegó hasta el 65%.

En las 3.359 bodas del tercer trimestre de 2005 contrajeron matrimonio 3.235 varones y 3.324 mujeres residentes en la C.A. de Euskadi. Para 3.049 esposos (94,3%) éste fue su primer matrimonio, mientras que 13 viudos y 173 divorciados volvieron a contraer nupcias. El porcentaje de primeros matrimonios de las mujeres fue similar al de los varones: las contrayentes solteras fueron 3.155 (94,9%), las viudas 6 y las divorciadas 163.

Respecto de la distribución de los matrimonios según la edad de los cónyuges, el 49% de las esposas tenía más de 30 años, mientras que entre los esposos este porcentaje ascendió al 69%.