Eustat ha presentado el “Informe Socioeconómico de Euskadi 2006”, en un acto que ha tenido lugar en el Palacio Euskalduna, en el marco del XX Aniversario del Euskal Estatistika Erakundea-Instituto Vasco de Estadística. La presentación de esta publicación ha contado con la participación de la Vicelehendakari y Consejera de Hacienda y Administración Pública del Gobierno Vasco, Idoia Zenarrutzabeitia, el Director General de Eustat, Josu Iradi, y Mikel Zurbano, Coordinador del Informe.

El Informe Socioeconómico es una publicación que se actualiza cada cinco años y cuyo objetivo genérico es ofrecer una visión de conjunto y sintética del grado de desarrollo de la C.A. de Euskadi en las diferentes áreas de interés socioeconómico, analizando detalladamente su evolución en el tiempo y en relación con las Comunidades y países del entorno.

La obra consta de catorce capítulos cuya autoría reside en otros tantos profesores y expertos universitarios que han sido dirigidos por los profesores Mikel Zurbano y Jon Leonardo en calidad de coordinadores. Como ambos explican, “la realización del “Informe Socioeconómico de la C.A. de Euskadi 2006” representa un intento riguroso de establecer un marco interpretativo de las profundas transformaciones socioeconómicas que están afectando a la sociedad vasca y que otorga a la historia reciente el calificativo de apasionante”.

El Informe Socioeconómico aborda los temas siguientes:

Población Extranjera, esta temática aparece por primera vez recogida en un informe de estas características, en consonancia con un fenómeno como el de la inmigración que, en el momento actual, genera grandes debates y que aunque incipiente es de amplio recorrido. Así, y en relación con la inmigración extranjera asentada en la C.A. de Euskadi, se explica que es una inmigración crecientemente latinoamericana, que está sustituyendo a la europea y que actualmente reside en áreas urbanas y, de forma mayoritaria, en las capitales, las cuales absorben las dos terceras partes de la inmigración extranjera del País Vasco.

En el capítulo que aborda la Economía vasca se establece el marco general de la evolución reciente y el diagnóstico de la economía en el contexto de la Unión Económica y Monetaria de la Unión Europea. Según el autor, la C.A. de Euskadi tiene ante sí el desafío de encauzar un proyecto propio de desarrollo en el ámbito europeo, conjugando de forma integral la modernización del tejido productivo, en el marco de la sociedad del conocimiento, y el desarrollo social inclusivo, necesario para la cohesión social.

Condiciones de Vida es un capítulo que analiza los cambios ocurridos en las condiciones de vida de la población vasca en el lustro 1989-2004. Pone de manifiesto la mejora general experimentada en los últimos años; no obstante, advierte de la realidad de la exclusión y del riesgo de la pobreza que cuantitativamente afecta a una pequeña parte de la población vasca.

En Distribución de la Renta se constata que de 1997 a 2001 la renta media personal en el País Vasco creció un 28%, es decir, de manera significativa y que el peso de sus diferentes compenentes se ha mantenido prácticamente constante. Asimismo, el diagnóstico hace especial hincapié en las desigualdades de renta que todavía persisten, particularmente, en materia de género.

El capítulo sobre el Mercado de Trabajo aborda las importantes transformaciones socioeconómicas que han tenido lugar en el ámbito laboral. Llama la atención, en particular, el incremento de la población activa debido al significativo aumento de la emigración y a la incorporación de la mujer, aunque por detrás aún de las cifras medias europeas. Incluso con este aumento de la población activa, y debido al importante crecimiento económico reciente, ha tenido lugar una significativa disminución de la tasa de desempleo, aunque afecta de manera desigual según el género y el territorio. En relación a la calidad del empleo generado, se observa que la relación laboral típica hasta hace bien poco (indefinida, a tiempo completo y de plantilla) cede terreno frente a un nuevo modelo emergente de relación laboral temporal, parcial y externa.

En el capítulo que trata sobre Demografía se ponen de manifiesto las transformaciones demográficas más importantes, mostrando no sólo los cambios más evidentes: aumento de la esperanza de vida, disminución de la natalidad y otros, sino aquéllos que tienen que ver con los modelos relativos a la división de roles, morbilidad y similares.

Sanidad. Evidencia la mejora de la salud de la población vasca, pero, paradójicamente, al mismo tiempo se señala cómo la mejora de las condiciones de vida de la población provoca una demanda creciente de recursos sanitarios derivado de la ampliación de la esperanza de vida y de la existencia de una población envejecida que dispara la necesidad de recursos a tasas muy superiores a la evolución del gasto.

Vivienda. Constata una mejora generalizada tanto en la calidad de las instalaciones como en el aumento de la superficie media útil de las viviendas, que crece el régimen de propiedad y que la vivienda vacía registra un descenso contante desde 1981. Por otra parte, en el Informe se aprecia el coste diferencial derivado de la necesidad de acceder al mercado de la vivienda en comparación con otras Comunidades Autónomas.

Bienestar e Integración Social. En este capítulo ha tenido lugar una de las transformaciones más notables que ha producido una mejora significativa en muchos aspectos. Por otra parte, constata que en la C.A. de Euskadi el sistema de protección social camina hacia la convergencia con otros países de la Unión Europea, si bien se mantiene un diferencial con respecto a los mismos. Sin embargo, la fortaleza de las estructuras familiares compensa las situaciones de necesidad en caso de desempleo, de enfermedad, de divorcio, etc. Esta es la razón por la cual en sociedades como la vasca la pobreza y la exclusión social no han crecido de forma llamativa en los últimos años, algo que sí ha ocurrido en algunos países del norte de Europa.

Educación. Evidencia la reducción progresiva del alumnado, junto con la feminización creciente de algunas titulaciones y con la reducción del ratio alumno-a/profesor-a.

El capítulo dedicado al euskara muestra, por una parte, los excelentes resultados obtenidos en la educación infantil, sobre todo a nivel escolar, donde se ha producido una consolidación efectiva del modelo D sobre el resto pero, al mismo tiempo, advierte de la necesidad de un apuntalamiento estructural que haga factible que pueda convertirse en un idioma utilizado de forma habitual en la vida ordinaria, más allá del sistema escolar.

En el capítulo que trata sobre Medio ambiente habla de la aprobación de la Estrategia Ambiental Vasca de Desarrollo Sostenible 2002-2020 como el principal hito en política ambiental de la C.A. de Euskadi y afirma que el grado de cumplimiento de la citada estrategia es relativamente alto.

Las conclusiones que se resaltan en Ciencia y Tecnología apuntan al esfuerzo realizado en los últimos años, situando a la C.A. de Euskadi en cotas sensiblemente superiores a las que presenta la media estatal. Al hilo de esto, destaca la consolidación de los centros tecnológicos y su papel pivotal en la materia, aunque, como contrapunto, diagnostica las carencias en el sector universitario y anima a que éstas sean superadas. Según el autor, la orientación industrial de las actividades científicas y tecnológicas no es un elemento que facilite las relaciones entre los agentes empresariales y la universidad, cuya imbricación viene a ser una de las propuestas de intervención más destacadas.

Para finalizar, en el capítulo relativo a a la Sociedad de la Información se analiza su situación en cinco ámbitos concretos de la misma: industria, usuarios/as, infraestructuras, contenidos y entorno. En este capítulo se observa un proceso de avance hacia la sociedad de la información que, en comparación con el resto de Comunidades del Estado español, sitúa a la C.A. de Euskadi entre los primeros lugares de todas las variables que analicemos, acortando el diferencial existente con respecto a las regiones punteras de la Unión Europea.